El respeto es uno de los valores más importantes para una sociedad: nace en la infancia desde el seno familiar y se desarrolla a lo largo de la vida. Poné en práctica estos consejos para que podás orientar a tus hijos e hijas y enseñarles la importancia de habituarse a ser respetuosos con sí mismos y con los demás.
¿Qué es el autorrespeto?
El autorrespeto no es más que quererse y darse el valor que uno mismo merece. De acuerdo con el portal Educo.org, el autorrespeto es la otra cara de la autoestima porque "valorarse a sí mismos" nos hace "respetarnos".
Asimismo, el respeto es consideración acompañada de cierta sumisión, con que se trata a una persona o una cosa por alguna cualidad, situación o circunstancia que las determina, sin causar ofensas.
Aprender a respetar y a respetarse desde la infancia es primordial para que los niños y niñas crezcan conociendo su valor, su dignidad y la de los demás, de modo que entiendan que es posible tener opiniones y perspectivas diferentes a las ajenas sin que esto sea causante de un disgusto o conflicto verbal, gestual o físico.
4 formas de enseñar a los niños a respetar y a respetarse
- Cría a tus hijos e hijas con valores
El respeto forma parte de los valores que deben aprender y poner en práctica tus niños y niñas desde que tienen uso de razón. La empatía, la solidaridad y la honestidad son valores que siguen teniendo mucha importancia hoy en día, pese a que cada vez parecen estar más en desuso. Por ello, es importante demostrarle a tus hijos qué impacto y qué resultados positivos pueden causar cuando actúan en consonancia con los valores que se les enseñe.
- Enseñales que tienen derecho a decir NO
Uno de los aspectos más importantes del autorrespeto es saber qué es bueno para uno y qué no. Tu hijo/a es dueño de su cuerpo, de su mente, de sus decisiones y de su vida. Por tanto, tiene derecho a decir que no. Explicale que no habrá consecuencias negativas por no querer hacer algo que no le gusta, en especial con alguien que no le inspire confianza.
Cambiemos vidas juntos
Llená este formulario y conocé como vos podes ayudar a llenar de sentido la vida de cientos de pequeños en Costa Rica.
- Sé un buen ejemplo: respeta a tu hijo/a
Los niños son como esponjas: absorben todo lo que perciben. Lo bueno, y lo no tan bueno. Si como padres o maestros exigimos respeto, lo ideal es que los niños y niñas también lo reciban. Concederle un voto de confianza a tu hijo/a y respeta sus deseos siempre y cuando no pongan en peligro su integridad. Para ello, puedes empezar enseñándole con juegos sencillos acordes a su edad o actividades que fomenten la unión familiar en casa.
- Evitá las etiquetas y los insultos
Las etiquetas dificultan que los niños se valoren, se quieran y por ende, se respeten a sí mismos. Los niños y niñas pueden llegar a creer algo que les hayan repetido mucho, en especial durante los primeros años de la infancia y en su adolescencia. Por ello, si decís a tu hijo que es “poco inteligente” o un "bueno para nada", lo más probable es que lo crea por mucho tiempo, en lugar de entender que ha actuado mal en un momento puntual.
Conclusión
Como ves, la clave para educar sobre el respeto es actuar con respeto también. “Respeta para que te respeten” es un lema un poco cliché pero completamente cierto. Enseñemos a nuestros niños y niñas a tratar a todos los seres vivientes con respeto y dignidad para construir una mejor sociedad cuyos valores perduren en el tiempo.
