Los días 11, 12 y 13 de octubre 68 catequistas de diferentes comunidades de la Zona Norte del país formaron parte de un taller basado en la metodología Bálsamo de Ternura. Durante estos días se logró abordar temas significativos, que buscaban alcanzar el objetivo propuesto. Este objetivo fue desarrollar un proceso de restauración en los y las participantes que les permitiera potenciarse como personas y establecer una mejor relación con quienes desarrollan su trabajo de catequesis (personas adultas y menores de edad).
Bálsamo de Ternura
Este taller se construye a partir de un enfoque vivencial y lúdico, desde donde cada participante va descubriéndose y reconstruyéndose a su propio ritmo, con el apoyo del grupo que contiene y aporta a su crecimiento. Se trabajó sobre las experiencias adversas en la niñez y sobre las fortalezas familiares en la niñez. Esto con el fin de que las y los participantes lograran identificar experiencias que marcaron su vida, tanto de forma positiva como negativa, y trabajar sobre ellas para mejorar en su trabajo en el ambiente y con las personas con las que se desenvuelven.
Un viaje seguro para la niñez extendiéndose
Los y las catequistas que formaron parte de esta experiencia aplicarán lo que han aprendido para impactar a más de mil niños, niñas, adolescentes y personas adultas con las que trabajan en sus procesos de catequesis. De esta manera podemos impulsar el viaje seguro para la niñez a muchas más comunidades a través de la ternura, extendiéndolos a espacios donde lo multipliquen líderes de diversa índole.
