Internet es un mundo extenso, a veces desconocido, que puede asustar a los padres a la hora de dejar a sus hijos e hijas navegar sus aguas. Pero tarde o temprano, nuestros nativos digitales van a necesitar acceso y lo mejor es ayudarlos a enfrentar todo lo que ahí puedan encontrar.
A esto se suma la nueva realidad que viven los niños y niñas con la pandemia: si antes pasaban sus horas en la sala de clases, ahora lo hacen conectados a un computador, con todos los contenidos de internet al alcance de un solo click.
A continuación, te dejamos 7 consejos para guiar a niños y niñas de primaria por la web.
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Conocer su entorno digital:
Educar desde el conocimiento es fundamental: conocer las redes sociales y sus tendencias, los contenidos que les gustan y a los que gravita su grupo etario, son solo algunas ideas. También se recomienda acompañarlos cuando navegan internet o acceden a una plataforma de streaming para conocer y orientar los contenidos. Adelantarse es la clave.
Iniciativas como e-Mentores, creadas de la mano de la Fundación Paniamor, buscan entregar herramientas para empoderar a familias completas sobre el saludable uso de internet.
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Crear un sistema
Hoy casi no nos podemos imaginar la vida sin internet. Nuestros hijos e hijas, que son nativos digitales, menos aún. Por ello, es necesario crear un sistema de reglas donde cada uno conozca cuáles son sus derechos, pero también donde estén establecidas sus responsabilidades en el uso de las redes sociales, videojuegos, navegadores web, móviles, entre otros dispositivos.
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Educar la responsabilidad online
En este punto es donde ponemos en las manos de nuestros hijos las herramientas para hacer buen uso de sus dispositivos. Una vez establecido un sistema de derechos y responsabilidades, lo primero es educarlos a no entregar información personal: no compartir fotografías, dirección ni número de teléfono a extraños. Adicional a ello, enseñarles a avisar si es que reciben contenido que les incomoda, no contestar mensajes de personas que no conocen (no sin antes conversarlo con sus padres). Esto aplica para los browsers de internet, los videojuegos, chats, redes sociales y otros donde exista interacción entre las partes.
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La diferencia entre los amigos y los conocidos digitales
No es secreto que existen adultos que se aprovechan de las redes sociales y otras plataformas de internet, para acceder a los niños y niñas. Por esto, es necesario que ellos entiendan la diferencia entre un amigo del colegio o del barrio, con quienes comparten cumpleaños y conocen a sus familias, de un conocido digital que los contactó por internet, por muy bueno que parezca.
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Entregar confianza y apoyo
Tener un ambiente de confianza es fundamental para que nuestros hijos e hijas se sientan capaces de pedir ayuda cuando la necesiten, especialmente si tenemos en cuenta la presión social de los pares y el cyberbullying. Creando espacios de conversación, nacerán oportunidades para crecer en familia y empoderar a los niños y niñas sobre su rol en las redes. Revisá algunas ideas en nuestro blog 3 actividades que fomentan la unión familiar en casa.
Para crear espacios de diálogo, World Vision ha creado iSmart, una plataforma de e-learning para aprender habilidades para la vida: desde reconocer las emociones, hasta identificar riesgos y fomentar la autoprotección. Elegir herramientas como esta, permite abrir canales de diálogo y autoconocimiento, entregando oportunidades para el autocontrol y, el desarrollo de la confianza entre padres e hijos, tan necesarios a la hora de educarlos en su actuar digital.
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No perder el control
Hay herramientas disponibles que permiten definir los accesos, los controles de seguridad de acuerdo a la edad del usuario, permisos de cada uno de los perfiles dentro de un mismo ordenador. Se pueden instalar filtros de contenido, geolocalización de los equipos, alertas y límites de tiempo. Eso se suma a las protecciones de un antivirus actualizado y la información que cada equipo, consola, móvil o juguete otorga de acuerdo a su uso.
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Conexión con límites
Por último, pero no menos importante: limitar la extensión de las conexiones a internet. La Asociación Norteamericana de Pediatría ha elaborado un cuadro con la cantidad sugeridas de exposición a pantallas de acuerdo a la edad de los niños:
- Menos de 18 meses: evitar exposición a las pantallas. Entre 18 y 24 meses, se pueden introducir con contenidos de alta calidad.
- Entre 2 y 5 años: máximo una hora diaria de contenido digital de alta calidad, siempre acompañados por un adulto que pueda guiar dichos contenidos.
- 6 años y más: se recomienda ser consistente con el tiempo que pasan frente a pantallas, teniendo en cuenta que este no debe reemplazar los horarios de ejercicio ni sueño.
Conclusión
Hoy en día nuestros hijos están insertos en un mundo digital que les permite aprender y divertirse. Pero la entretención debe ir de la mano con la prevención. Estar al día con las últimas tendencias digitales, establecer límites y educarlos sobre qué es lo que se puede hacer y qué no, son algunas herramientas que se pueden poner en práctica a diario.
Te invitamos a registrarte en iSmart y ser parte de una comunidad segura, que te acompañará a ti y a tu familia en el camino para ganar confianza en sus propias habilidades para la vida y de paso, construir una relación sana con internet y todo lo que este tiene para ofrecerles.